Seguro que has escuchado hablar de las frecuencias Solfeggio, de las exactas frecuencias que sirven para actos que podemos llamar milagrosos. Sosteniendo estas frecuencias, existen mitos, historias de nazis y una gran cantidad páginas web y videos en Youtube con frecuencias misteriosas que afirman curar enfermedades o regenerar el ADN. Y ahora, te invito a que sigas leyendo con espíritu indagador, para ir investigando estas increíbles frecuencias solfeggio. Para empezar, te comparto estas preguntas:
- ¿De dónde salen estas frecuencias?
- ¿Porqué se asocian unos sonidos exactos a efectos sorprendentes?
- ¿Está demostrado?, ¿hay estudios que avalen estas afirmaciones?
- ¿Qué hay de cierto o de mito en todo esto?
Como músico, voy a darte mi punto de vista en todo este espinoso tema, para que puedas sacar tus propias conclusiones.
Vamos allá.
Parte I. Solfeggio y Solfeo
Antes de empezar a analizar y ver el origen de estas frecuencias milagrosas, vamos a ver el origen de esta palabra.
La palabra Solfeggio es de origen latino/italiano y corresponde a nuestra palabra Solfeo.
Etimológicamente proviene del solfège francés y el solfeggieto italiano. Se derivan de los nombres de dos de las notas utilizadas: sol y fa. La palabra solmisación deriva del latín medieval solmisatiō, y en última instancia de los nombres de las sílabas sol y mi.
El Solfeo es el estudio de las notas musicales para aprender a entonarlas, a reconocer la altura de las notas, los intervalos musicales para poder cantar partituras en diferentes tonalidades y para cantar de forma afinada.
El Solfeo se estudiaba en España en los años 60 y 70. Eran varios años de Solfeo y al terminar los estudios, ya tenías un conocimiento de las notas musicales, podías entonar, cantar canciones, reconocer melodías, etc. Era un estudio muy teórico de la música y por experiencia propia, bastante pesado y antimusical.
Por suerte, el Solfeo se fue transformando en Lenguaje Musical, más orgánico y fácil de estudiar.
Como anécdota te diré que tuve que estudiar 5 años de Lenguaje Musical, así que se muy bien de lo que hablo.
Para nombrar estas frecuencias sanadoras, se ha recuperado el nombre italiano, Solfeggio. De momento ya vemos que el nombre se refiere a cantar notas y a reconocer intervalos melódicos y poco tiene que ver con frecuencias exactas, sino con relaciones entre notas. También veremos unos graves errores en las frecuencias solfeggio. Sigue leyendo.
Te repito, no es tanto la frecuencia, como la relación entre frecuencias y veremos más adelante porqué.
Solfeggio Frecuencias Sanadoras
Probablemente has escuchado el poder sanador de las frecuencias Solfeggio. Determinadas frecuencias sirven para sanar o crear efectos beneficiosos en el ser humano. Aquí tienes la lista de frecuencias sagradas y todo lo que hacen.
- DO – 396 Hz – Liberando la culpa y el miedo
- RE – 417 Hz – Deshaciendo situaciones y facilitando el cambio
- MI – 528 Hz – Transformación y milagros (reparación del ADN)
- FA – 639 Hz – Conexión / Relaciones
- SOL – 741 Hz – Despertar la intuición
- LA – 852 Hz – Regresando al orden espiritual
En Internet vas a encontrar esto casi siempre. Lo que resulta sospechoso es que no hay ninguna fuente donde diga de dónde sale esta información. Y cuando uno presta atención y le explican cómo se calculan las notas, podemos percibir que estas frecuencias están todas mal calculadas. No es que lo diga ya, es que te voy a enseñar a calcularlas y lo vas poder comprobar por tu cuenta. Esto de las frecuencias solfeggio, empieza a tambalearse.
Matemáticas básicas. Conceptos musicales básicos. Luego lo sabrás.
Parte II. El origen de la escala musical y Pitágoras
Debemos irnos muy atrás en el tiempo, hasta la antigua Grecia, para descubrir el origen de la escala musical. La información es poder y para poder saber de qué hablamos, vamos a la fuente de información fundamental. Pitágoras.
Sí, las frecuencias Solfeggio, no tienen un origen medieval, sino Griego. Sencillamente, historia de la música.
La escala musical se atribuye (aunque seguramente sea anterior al filósofo) a los descubrimientos de Pitágoras, el gran maestro del siglo VI a.C. Filósofo, matemático, músico, y creador de un sistema espiritual que marcó la historia.
Gracias a sus experimentos sobre los sonidos, descubrió que habían ciertas distancias entre notas que sonaban bien y ciertas proporciones matemáticas naturales, que dieron origen a la escala original, la escala mayor, que es la base de toda nuestra música.
Dicho de otra manera, descubrió unas relaciones entre notas que eran agradables, armónicas. No descubrió una frecuencia exacta, sino un sistema de relaciones. Esto es fundamental para la música.
No se trata de una frecuencia exacta, sino de relaciones entre frecuencias. Pura matemática. Matemática y geometría sagrada.
Este sistema de notas, que nosotros conocemos como escala mayor, se utilizaba por la comunidad pitagórica para sanar enfermedades, tanto del cuerpo como del alma, según dicen.
La enfermedad se entendía como un desequilibrio, un desajuste y una pérdida de la armonía fundamental.
Al exponer a la persona enferma a la armonía, orden y belleza de la escala musical, reflejo de la armonía cósmica, las personas podían curarse. Era el efecto de la música sagrada de las esferas, a nivel humano.
Me encantaría seguir hablando sobre Pitágoras, es un tema que me apasiona, pero me iría demasiado lejos del tema que nos ocupa (o no). Te recomiendo un magnífico libro. Te dejo un enlace a Amazon sobre las Vidas de Pitágoras. Te aseguro que te va a encantar.
Y ahora volviendo a nuestro tema, pensemos, en aquella época, los instrumentos no tenían una gran precisión ni afinaban de forma exacta. Por tanto, hablar de una nota DO, afinada exactamente a alguna frecuencia, es realmente atrevido, cuando no imposible.
¿Qué usaban que sí que era exacto?, las proporciones, sin duda.
Los número sagrados.
Breve resumen de Pitágoras
Pitágoras, mitad hombre y mitad dios, iluminado y un personaje que cambió la historia, al mismo nivel que Jesucristo, Zoroastro o Buda. Uno de los grandes seres de la humanidad.
Después de recorrer medio mundo y de aprender con los grandes sabios de Grecia, Egipto, Mesopotamia, etc, fundó un movimiento espiritual, social y político en la Magna Grecia (sur de Italia). Un movimiento que tuvo un gran éxito.
La comunidad pitagórica se dedicaba al camino espiritual y a la vez, político. Aprendían los grandes secretos de la creación muy ligados a los sonidos y la música. Era una comunidad muy cerrada, por lo que no se escribía nada, todo era transmitido en función del nivel de cada alumno/a.
Si Pitágoras no escribió ni una sola palabra, ¿cómo es que podemos hablar de lo que decía?. Investiguemos.
Sobra decir que como todo movimiento que intenta transformar el mundo, generó envidias, celos y la comunidad pitagórica fue perseguida y masacrada.
Pocos sobrevivieron a la matanza, pero alguno quedó vivo y entonces tuvieron que tomar la decisión de conservar el conocimiento pitagórico. Se dedicaron a escribir todo lo que pudieron, para salvarlo del olvido. Y se dice que estos 3 libros sagrados, llegaron a mano de alguien muy conocido. Platón. Y de ahí hasta el siglo XXI.
Los números sagrados
La Tetraktys.
Según se dice, Pitágoras descubrió que ciertas frecuencias eran más concordantes que otras. Y descubrió también que las que eran concordantes, guardaban entre sí una proporción matemática.
Y esas proporciones salían de los cuatro primeros números naturales, el 1, 2, 3 y 4. La famosa Tetraktys pitagórica.
Sumando estos números obtienes 10, el número más sagrado de esta comunidad y base de nuestra cultura decimal.
De estos números sale la escala musical completa. Estos números generan tres fórmulas matemáticas:
- La media geométrica
- La media aritmética
- La media armónica.
Te lo voy a explicar todo de forma sencilla, ya verás que lo vas a entender rápidamente. Te pongo un ejemplo para que veas que no es tan difícil. Vas a aprender el secreto de la música y verás que nada tiene que ver con las frecuencias solfeggio.
- Qué es la Media Geométrica: sencillamente es coger un número y hacer una serie donde el siguiente es el doble. Vamos, 1, 2, 4, 8, 16, 32, 64, 128, etc. Si multiplicas por dos cualquier número, tendrás el doble, una proporción geométrica. ya te imaginas que es esto lo que hacemos para calcular la octava.
- Qué es la media aritmética. Para hacerlo sencillo, esta fórmula se usa para calcular a partir de una nota, la que está a cinco notas de distancia. O sea, si partimos del Do, podremos calcular la nota Sol (de Do a Sol hay cinco notas, cuenta para ver que es cierto). Se calcula multiplicando por 1,5 la frecuencia de la primera nota.
- Qué es la media armónica. Esta fórmula la usamos para calcular a partir de una nota, cual es la que está a distancia de cuatro notas. Si tomamos el Do, sería el Fa. Se calcula multiplicando por 1.333333 la frecuencia de la primera nota.
Ahora te pongo ejemplos para que lo veas en la práctica.
Parte III. Calcular Frecuencias Solfeggio
Para tenerlas a mano, vuelvo a poner las frecuencias asociadas a las notas.
- DO – 396 Hz
- RE – 417 Hz
- MI – 528 Hz
- FA – 639 Hz
- SOL – 741 Hz
- LA – 852 Hz
Partimos de la nota Re, que según las frecuencias solfeggio, suena con la frecuencia 417 hz. Vamos a aplicar la media aritmética, para conseguir la quinta nota a partir de Re, o sea, la nota La.
417 multiplicado por 1,5 = 625,5 hz.
Maldición, esto no cuadra. Según las fórmulas para afinar una escala, el La tendría que ser 625 y según las frecuencias solfeggio es 852. ¿Quién se equivoca, Pitágoras?, lo dudo.
Venga, otra prueba más.
Tomamos el Do, que suena a 396 hz. Vamos a calcular su cuarta nota, el Fa.
396 multiplicado por 1,333333 = 527,9 hz. Y según las frecuencias solfeggio el Fa suena a 639 hz.
Y así todas las notas.
Ninguna nota de las frecuencias solfeggio tiene relación alguna con las notas de la escala musical.
Parte IV. El origen del nombre de las notas y la frecuencia
Los nombres que utilizamos para referirnos a las notas musicales, tienen su origen en el siglo XI. ¿Cómo eran antes?, ves a saber.
Pero en un momento de la historia, durante el siglo XI, el monje filósofo Guido d’Arezzo, pone nombre a las diferentes notas de la escala mayor (la de Pitágoras).
Curiosamente, encuentra un himno a San Juan, que exactamente coincide la primera sílaba de cada frase, con las notas de la escala mayor, que siguen las proporciones matemáticas. Decide coger la sílaba para nombrar estas notas.
Así, tenemos:
Ut – Re – Mi – Fa – Sol – La – Si
La nota Ut, se cambia más tarde por la sílaba Do, más fácil de pronunciar.
Fíjate que hizo Guido, puso nombre a una relación entre notas, no a frecuencias exactas. Esto ya nos va indicando que algo en las frecuencias Solfeggio no acaba de funcionar en relación a la historia de la música.
Parte V. Historia de las frecuencias Solfeggio
Según puedes encontrar en internet, el origen de las frecuencias Solfeggio tiene que ver con cantos gregorianos, con conspiraciones nazis y con el control de la humanidad. Como si nuestra esclavitud fuera culpa de alguien externo y no de nuestro Ego, el mayor dictador (digo yo).
Aquellos monjes gregorianos, no se sabe de qué siglo, descubrieron el poder sanador de ciertas frecuencias, tal como seguramente también hacían los pitagóricos ( y en otras culturas me atrevo a decir que hacían los mismo).
¿Em qué notas cantaban?, antiguamente no existían los afinadores. Se usaba la memoria, el oído absoluto, la comparación con algún de la naturaleza que servía para dar el tono, etc. Quien sabe.
Todo esto queda oculto en los pasillos del Vaticano y se impide que llegue a la gente para curarse. Así resumido, queda un poco absurdo, pero el mito de internet propaga algo muy similar.
Además, para más desastre, los nazis, con Goebbels a la cabeza, modificaron la frecuencia original, 432 hz para la nota La, y lo subió a 440 hz, que es la que usamos ahora y por eso eso estamos todos en la miseria.
Pues ni una ni otra coinciden con la lista que te puse al principio, que indica que La es 852 hz. Si aplicamos la media geométrica, para saber cómo sonaría el La más grave, no sería ni 440 ni 432, sino
852 dividido entre 2 = 426 hz. Venga, más fiesta para todos. Vaya lío de frecuencias.
Dicho así, de forma resumida, no parece que nada de esto tenga mucha lógica. Y revisando la historia, veremos que algo no cuadra.
En la antigüedad, desde la época clásica hasta bien entrado el renacimiento, no se usa una frecuencia exacta para indicar la altura de la nota. No existe ningún aparato que indique la frecuencia de un Do, por ejemplo.
Cada país, cada región, cada lugar, podía cantar más grave o agudo, según la costumbre y la capacidad de las personas y los instrumentos.
Lo que no podía cambiar, era la relación entre notas, o sea, la distancia entre el Do y el Re, por ejemplo, o entre el Sol y el Mi. Estas distancias se basan de nuevo en las fórmulas matemáticas de Pitágoras y son inmutables.
Para que nos entendamos, una proporción musical es una distancia que se da entre notas. Por ejemplo, la distancia entre Do y Sol, es de cinco notas (una media aritmética). Si quieres una distancia de 5 notas desde el Mi, tendremos el Si (cuenta y verás que hay cinco), por tanto, se sigue manteniendo la misma media aritmética.
Esto es una proporción. La distancia de cinco, o quinta, es una proporción sagrada. Ya no dependemos de una frecuencia exacta, sino de relaciones entre sonidos.
Al no haber sistema de definición de frecuencias exactas, pues que cada cual lo cantara según pudiera, respetando las normas de la escala musical. ¡¡Respetando las proporciones!!
Además, muy probablemente, serían notas hacia el grave, ya que los instrumentos eran más arcaicos, los procesos de construcción no eran tan elaborados y las cuerdas eran de tripa animal, por lo que todo esto sumado, no permitía afinaciones muy agudas, bajo riesgo de romper la cuerda o el instrumento.
Vamos que las frecuencias Solfeggio, destripan las matemáticas, a Pitágoras y al sentido común.
Parte VI. Conclusión de las Frecuencias Solfeggio
En este artículo, he intentado compartir contigo información, teoría musical y conocimientos para poder discernir la verdad de la fantasía. Con las frecuencias solfeggio, hemos visto que no cumple para nada, ninguna relación matemática entre sus notas, por lo que no se sabe de dónde salen.
Nada impide que sigas escuchando estas frecuencias, que creas firmemente en su poder. No intento convencerte de nada. Tan solo indicarte que la base teórica que se vende para justificar las frecuencias solfeggio, no tiene ninguna base lógica ni musical.
Si te interesa saber más sobre música y pitágoras, este tema se trata en profundidad en la formación de Sonoterapia de Barcelona. Te invito a informarte y quizá a participar.
A partir de ahí, haz lo que sientas.